ABC – La noche del 6 de junio de 2003,Francisca iba por la calle con un amigo en Santa Coloma de Gramenet.Acababan de tomar un chupito y paseaban. De repente, de entre unoscoches aparcados, salió el ex compañero sentimental de ella, Eduardo C.Francisca declaró ayer ante el tribunal de la Sección Segunda de laAudiencia Provincial de Barcelona que su ex pareja sacó un cuchillo deunos 20 centímetros de filo, lo empuñó y se lo intentó clavar. Ella loesquivó mientras que su amigo, al ver la situación, se interpuso entreambos.

El amigo, de nombre Dionisio, quedaba tendido enel suelo a los pocos segundos con siete puñaladas, según el informeforense. Tres de ellas fueron al pecho y una, concretamente, afectó ala vena cava hasta el punto de producirle la muerte. Poco antes,Francisca le oyó decir a su ex pareja: «Puta, ¿ahora vas con éste? Sino vas conmigo, no vas con nadie».

Ante el juez, el acusado dijo ayer que fue la pareja quien se habíaabalanzado sobre él y que, por su parte, actuó en legítima defensa.Eduardo C. negó todos los cargos por los que se le sentó en elbanquillo: delito de homicidio, delito de homicidio en grado detentativa, dos delitos de lesiones, delito de lesiones en grado detentativa y delito de violencia habitual. Por todos ellos afronta unapena de 35 años y 6 meses de cárcel, además de una indemnización de8.000 euros para Francisca y 14.655 euros para cada uno de los cuatrohermanos del fallecido.
Según el fiscal, el acusado sacó un machete de unos 30 centímetros delargo, se acercó a su ex compañera sentimental, Francisca G.M., eintentó clavárselo en tres ocasiones mientras le decía ‘puta, si no vasconmigo no vas con nadie’.

Francisca consiguió esquivar el machete y fue entonces cuando su novio,Dionisio Z.M., se interpuso entre ambos para que ella pudiese huir ypedir ayuda. El acusado persiguió a Dionisio y le asestó variaspuñaladas, una en la pierna, otra en la mano derecha y tres en elpecho, lo que le causó la muerte casi al instante.

Una testigo, que la noche de los hechos seencontraba en las inmediaciones del pasaje Salvatella de Santa Colomade Gramenet, manifestó ayer haber visto a las tres implicadas y cómouno de los hombres clavaba el cuchillo al otro.

Por la mala relación con Francisca, Eduardo C. ya fue sentenciado en unjuicio de faltas en 2001 por el Juzgado de Instrucción número 3 deSanta Coloma de Gramenet. En aquella ocasión le había propinado variosgolpes diciéndole «te tengo que ver muerte».

El 26 de abril de 2003, según el relato del mionisterio fiscal, elhombre volvió a agredirle, esta vez con una «pata de cabra» (palanca dehierro), lo que provocó varias contusiones en la víctima. Franciscavolvió a denunciarlo. Al día siguiente, de nuevo su ex pareja, ysiempre según la fiscal, le lanzó a los ojos un spray de autodefensa.Francisca dijo ayer anteb el tribunal que «lo había hecho unas siete odiez veces, pero eran tantas que ya ni ponía denuncia».

Agresión con un «cutter»

El 14 de mayo estuvo a punto de perder la vida. Francisca se encontrabaen la calle, su agresor le roció con el spray en la cara y acto seguidole practicó varios cortes en el rostro y en el cuello con un «cutter»mientras le decía: «Aquí te tenía que pillar». Los médicos aseguraronque un corte de este tipo, de una profundidad de dos centímetros ypracticado repetidamente, difícilmente se debe a un accidente fortuitotal como sostiene el letrado de la defensa, quien solicita laabsolución de su cliente.

Eduardo C. asegura que todo es un engaño de la mujer, Francisca, por sucondición de ex drogadicta. «Lo único que quería era sacarme eldinero», afirmó. Ella, por su parte, sometida ahora a un proceso dedesintoxicación, explicó que desde que abandonaron la relación «fue unapesadilla, porque durante dos años intentó matarme contínuamente. Dejóel trabajo para perseguirme y vivía en su coche para que la Policía nopudiera encontrarlo en ninguna casa cuando querían mandarle lasdenuncias».

adminGeneralABC - La noche del 6 de junio de 2003,Francisca iba por la calle con un amigo en Santa Coloma de Gramenet.Acababan de tomar un chupito y paseaban. De repente, de entre unoscoches aparcados, salió el ex compañero sentimental de ella, Eduardo C.Francisca declaró ayer ante el tribunal de...Santa Coloma de Gramenet